martes, 30 de octubre de 2007

Importancia de la neurexina en la formación y funcionamiento de las conexión en el cerebro


03/10/2007
Redacción
Científicos de la Universidad de North California han mostrado que la proteína neurexina es necesaria para la formación y el correcto funcionamiento de las conexiones entre las células nerviosas. Este descubrimiento hecho en Drosophila melanogaster podría permitir avanzar en la comprensión de desórdenes relacionados con el autismo, ya que recientemente se ha identificado a esta proteína como un factor de riesgo genético para el autismo.
El estudio publicado en Neuron, es el primero en el que se demuestra la importancia de las consecuencias de la mutación de esta proteína tan importante en la sinápsis. En el caso de los vertebrados como el ratón, tres genes diferentes codifican la producción de neurexinas. La eliminación de uno de estos genes no produce efectos adversos en los animales, sin embargo la eliminación de los tres genes tiene efectos fatales. En el caso de la mosca de la fruta, que solamente tiene un gen para la neurexina, su eliminación hace que las moscas apenas sobrevivan.
Las moscas tienen problemas para moverse, y al examinarlas se observa que la mitad de las sinápsis se habían eliminado y que las que quedaban eran defectuosas, causaba una menor producción de señales químicas.

Se consigue revertir el retraso mental en ratones


10/09/2007
Redacción
Científicos del Massachusetts Institute of Technology han publicado recientemente en la revista Proceedings of the National Academy of the Sciences USA que se puede revertir el retraso mental en modelos murinos de la enfermedad.
En el estudio se utilizó el bloqueo de una enzima implicada en el desarrollo celular para mejorar el daño cerebral de los ratones que era causado por un desorden genético conocido como síndrome X frágil.
El síndrome X frágil está causado por una mutación en un gen (FMR1) localizado en el cromosoma sexual X, lo que produce la pérdida de la proteína FMRP. El resultado es una enfermedad que se caracteriza por la hiperactividad, la falta de atención, comportamientos repetitivos, ansiedad y dificultades cognitivas que van desde el aprendizaje hasta el retraso mental.
[PNAS 2007, doi: 10.1073/pnas.0705003104]

El dolor distrae al cerebro


07/08/2007
Redacción
La región del cerebro relacionada con el dolor es distinta de la que está implicada la interferencia del procesamiento cognitivo debido a una tarea de distracción de la memoria. Éstas son las conclusiones a las que ha llegado el equipo del Dr. Bingel et al y que se han publicado en la revista Neuron.
Para encontrar la región responsable de que el dolor pueda distraer la atención, los investigadores preguntaron a voluntarios sobre la realización de tareas cognitivas que implicaban la identificación de imágenes y la memoria de trabajo para recordar estas imágenes. Realizaron estas tareas mientras sufrían diferentes niveles de dolor causado por un rayo láser sobre sus manos y durante estos test, se escanearon los cerebros de los voluntarios usando imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI).
Con ello pudo identificarse al complejo occipital lateral (COL) como el área relacionada con la cognición afectada tanto por la memoria de trabajo como por el dolor. Estos resultados eran los esperados, ya que este área es conocida por su implicación en el procesamiento de imágenes.
También se estudiaron imágenes de fMRI que indicaban que CCRA es el centro del cerebro a través del cual el dolor influye en COL. En contraste, encontraron que la memoria de trabajo parece afectar a COL a través de una región diferente, el córtex parietal inferior.

Las células del cerebro, comunicadas unas con otras por más de una vía


24/10/2007
Redacción
Científicos de la Universidad Johns Hopkins han descubierto que los nervios de la materia blanca del cerebro de los mamíferos tienen más funciones que la de meros transportadores de la información entre las distintas partes del cerebro. El descubrimiento, publicado en Nature Neuroscience, muestra que las células del cerebro, a diferencia de lo que se pensaba, se comunican unas con otras por más de una vía.
Los descubrimientos se centran en las células precursoras de los oligodendrocitos, cuyo papel principal, una vez han madurado a oligodendrocitos, es la de envolver a los nervios, formando una capa de mielina que los aísla y protege. Las células inmaduras simplemente se sitúan en los alrededores, dividiéndose lentamente, esperando ser activadas.
Para poder aprender más acerca de estos precursores de los oligodendrocitos que se encuentran en la materia blanca, los investigadores midieron la actividad de estas células precursoras de forma individual en el cuerpo calloso, una región cerebral que une ambos hemisferios. Sorprendentemente, se midieron señales eléctricas medidas por el neurotransmisor glutamato en estos precursores, similares a las señales que aparecen entre neuronas dentro de la sustancia gris, cuando en el cerebro de ratón, en las células precursoras de los oligodendrocitos no se producen sinapsis. Teóricamente, estos precursores podría usar el glutamato por una vía diferente. Bergles y su equipo estudiaron la procedencia de este glutamato. Para ello, estimularon células nerviosas individuales y descubrieron que los impulsos eléctricos que se producen en el nervio generan la liberación de glutamato, el cual causa las señales eléctricas en los precursores de los oligodendrocitos.
Posteriores estudios microscópicos demostraron que existen reservas de glutamato en las fibras nerviosas que son las que actúan sobre los precursores. Todas las células nerviosas de la materia blanca liberan glutamato cerca de los precursores, pero tienen algo en común, y es que no están aisladas por la mielina. La velocidad en la transmisión de los impulsos eléctricos se debe a la mielina, y su falta produce que la transmisión sea de 20 a 90 veces más lenta que la de las células que sí la poseen. Es conocido el hecho de que la pérdida de mielina deteriora la señal y la transmisión de la información, lo que produce la muerte de las células y conduce a la condición neurodegenerativa de la esclerosis múltiple. Los autores especulan que la actividad de la materia blanca podría ayudar a la transmisión de la información en las células nerviosas sin mielina que se encuentran cerca de los precursores de los oligodendrocitos.

Restauran los ritmos fisiológicos de cerebros epilépticos


19/10/2007

En un artículo publicado recientemente en Neuron, un grupo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha descrito el mecanismo responsable de la distorsión de los ritmos cerebrales de la epilepsia en el lóbulo temporal. Según este trabajo, dirigido por la Dra. Menéndez de la Prida, es posible normalizar los ritmos fisiológicos en el cerebro epiléptico.
Este estudio permite explicar un fenómeno típico de la actividad eléctrica del hipocampo de los pacientes epilépticos que se conoce como fast ripples. Éstos aparecen durante la vigilia (periodos de inmovilidad) y durante sueño en etapas de onda lenta y consisten en oscilaciones rápidas de entre 200 y 600 Hz (el doble que las registradas en el hipocampo normal).
Según los autores, los fast ripples se producen como consecuencia de una desorganización de los disparos que producen las neuronas del hipocampo, una región del cerebro relacionada con la formación de la memoria e implicada en la epilepsia del lóbulo temporal.
Utilizando toxinas que intervienen en los mecanismos de transmisión sináptica, se logró devolver in vitro la regularidad del disparo neuronal al hipocampo de ratas epilépticas, eliminando los fast ripples. Aunque aún muy preliminar, este enfoque podría abrir la puerta al diseño de fármacos con capacidad de restaurar funcionalmente la actividad oscilatoria normal del hipocampo epiléptico.

Modelo de ondas en el centro de procesamiento visual del cerebro


19/09/2007
Redacción
Científicos de la Universidad de Georgetown han descubierto una de las formas con las que se procesa la información visual es mediante la propagación de ondas que se mueven entre distintas áreas del cerebro. La señal pasa a través de distintas áreas del cerebro a modo de ondas progresivas, hacia delante y hacia atrás.
El Dr. Wu y sus colaboradores visualizaron este modelo mediante un nuevo método basado en imágenes obtenidas a partir de un marcador sensible a voltaje, usando un marcador especial que se unía a la membrana de las neuronas y cambiaba de color cuando el potencial eléctrico de la célula se modificaba con la activación de las neuronas.
Tradicionalmente, los científicos habían estudiado la actividad del cerebro colocando electrodos y midiendo las corrientes eléctricas que están relacionadas con la actividad neuronal. Con este nuevo método óptico se puede estudiar la actividad secuencial en diferentes sectores del córtex visual cuando el cerebro está procesando la información sensorial. El modelo de ondas desempeña un papel importante en la iniciación y en la organización de la actividad del cerebro que implica a billones de neuronas.
Su estudio puede ayudar a entender las ondas cerebrales anormales que aparecen en el cerebro de los enfermos de Parkinson o los que sufren epilepsia, y como falla cuando el cerebro de los pacientes con Alzheimer no pueden organizar adecuadamente la actividad de su población neuronal.